Hay muchas opiniones sobre la cultura de los pocket rockets, o vehículos de tamaño pequeño y muy veloces, algunos de ellos, deportivos desde su concepción. Pusimos a prueba el Fiat 500 Abarth, una edición especial que rinde homenaje a México.
Al igual que sus ediciones anteriores, el 500 Abarth Tributo México, ostenta la particularidad de llegar al público en los colores de la bandera mexicana: rojo, blanco y verde, aunque ha resultado ser un verde del tono “militar”.
Así fue que en una mañana a pleno sol pudimos probarlo y fotografiarlo en un terreno que nos resulta por demás familiar: el Desierto de los Leones, con sus clásicas curvas dignas de una etapa de la Carrera Panamericana.
Sin duda se trata de un vehículo con todo lo que requiere una unidad del segmento premium. Este modelo cuenta con un motor 4 cilindros 1.4 litros Turbo de 160 caballos de fuerza y 170 Newton/metro de torque, acoplado a una transmisión manual de 5 velocidades (el que nosotros probamos).
Por eso lo de pocket rocket ya que con semejante configuración y casi una tonelada de peso, en las calles se lo ve ‘correteando’ habitualmente mano a mano con BMWs 118 o algunos Seat Ibiza.
El 500 Abarth Tributo México al igual que sus predecesores, pertenecen a ese nicho muy especial que corresponde a los amantes de la deportividad al conducir. No por nada viene equipado con amortiguadores Koni y resortes de alto desempeño e incluso barras estabilizadoras en ambos ejes.