Esta semana, una sola decisión tuvo un gran impacto en la Fórmula 1. La salida de Vettel de Ferrari impactó más allá de lo esperado. Sainz se fue de McLaren a Ferrari, Ricciardo de Renault a Ferrari y el puesto vacío que dejará al final de la temporada pone al filo del abismo al equipo francés.
La temporada 2019 no fue una de las mejores para Renault en rendimiento a lo que se suma que McLaren llegó a un acuerdo con Mercedes para utilizar sus motores desde 2021. La escudería buscaba regresar a sus días de gloria sin embargo, el 2020 ha sido un cúmulo de sorpresas.

Cyril Abiteboul, director gerente de Renault, se pronunció al respecto de los últimos sucesos: “En nuestro deporte, y particularmente dentro de la situación extraordinaria actual, la confianza recíproca, la unidad y el compromiso son, más que nunca, valores críticos para un equipo de trabajo… Estoy seguro de que la temporada 2020 nos permitirá lograr aún más juntos. Nuestras ambiciones y la estrategia del Renault DP World F1 Team no cambian”.
El destino de Renault en la Fórmula 1 pende de un hilo. Los grandes retos que tiene que afrontar no solo están en la pista.